La meditación es una experiencia espiritual intensa. El propósito de la meditación es el canalizar nuestra conciencia en una perspectiva mas positiva a través de transformar el estado mental de uno. El meditar es volverse hacia adentro, el concentrarse en el ser interior.
Hay muchas formas de meditación tales como la meditación chakra, la meditación yantra, la meditación vipassana y la meditación mantra. Mientras que las formas de meditación varían, todas ellas usan las técnicas de concentración, las cuales nos ayuda a ser testigos de nuestros pensamientos. Cuando la mente está calmada, como un lago sin ninguna ola, nosotros experimentamos paz y poder (control total).
La tradición de la meditación viene desde el principio de la historia humana. Miles de años atrás, Pantanjali, un Hindú sabio de leyenda, describía un proceso por el cual la capacidad para meditar es actualizada. El la llamó autorrealización, ya que en el estado de meditación, él experimentaba una conciencia absoluta de su "ser".
El mecanismo por el cual la autorrealización sucedía era un secreto mantenido que era pasado desde un gurú a sus discípulos después de largas penitencias, disciplina y purificación.
En el siglo 14 el gran santo Gyaneshwara de India Central pidió permiso a su gurú para traducir los textos secretos escritos en sánscrito, lengua vernacular popular. Así la tradición del misticismo y la meditación empezó dentro de la población en India.
El proceso de meditación normalmente cubre 3 etapas estas son: Concentración (dharana), Meditación (dhyana) e Iluminación (samadhi.) El individuo preparándose para meditar normalmente empieza por medio de utilizar su conciencia tal como enfocar su mente en cierto objeto. Una vez que nuestra atención se compromete, la concentración se vuelve meditación o dhyana. Y a través de meditación continua, el meditador surge con el objeto de concentración, lo cual podría podría ser el momento presente o la entidad divina.
En algunas ramas de la filosofía India, la percepción directa desde el ser interior (mana) junto con la percepción que es filtrada a través de los cinco sentidos (pancha indriya) desde una parte de su epistemología (pratyaksha jnana) y esta autorrealización o auto conciencia (como fue popularizada por Paramahansa yogananda) es nada, pero el conocimiento del ser puro, el ser.
La meditación no es necesariamente una practica religiosa, pero debido a su elemento espiritual forma una parte integral de la mayoría de las religiones, incluso el objetivo básico de la mayoría de los estilos de meditación permanecen igual y son realizadas en un estado de quietud interior y exterior; todas ellas varían de acuerdo a marcos religiosos específicos dentro de los cuales son puestas. La preparación, postura, la extensión del período de meditación, elementos particulares verbales o visuales, todo contribuye a varias formas de meditación. Algunos de los métodos más populares son, la meditación trascendental, yoga nidra y la vipassana.
La técnica de meditación trascendental está basada en la tradición continua antigua de conocimiento de la historia humana, la tradición Veda de iluminación de la India. Este conocimiento fue traspasado por maestros Vedas de generación en generación durante miles de años. Cerca de 50 años atrás, Maharishi Mahesh Yogi, introdujo la Meditación Trascendental al mundo, restaurando el conocimiento y la experiencia de estados más altos de conciencia.
La técnica de meditación trascendental permite que la mente se instale hacia adentro. El funcionamiento del cerebro se vuelve altamente ordenado y coherente... el cerebro completo se vuelve animado.
La practica regular de esta técnica desarrolla el potencial total del cerebro. Tu mente en forma espontánea y natural, se calma hacia un estado expandido de tranquila alerta mientras tu cuerpo disfruta el descanso profundo y refrescante.
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